Por: Susy Galindo
“Escribir es la manera más profunda de leer la vida”
Francisco Umbral
El problema de la falta de lectura es cada vez más común, a causa de la inmediatez de la vida, de la rapidez en que los eventos se tienen que dar, del trabajo absorbente, de la influencia de las imágenes y estímulos audiovisuales que se ven diariamente. Sin embargo, muchos no se dan cuenta de las graves consecuencias que tiene no apartar un tiempo para leer y no digamos, para escribir.
Se habla del combate contra el analfabetismo. Se cree que con aprender a leer y a escribir ya se logró todo lo deseado. No obstante, el analfabetismo no involucra solamente la falta de aprender a leer, también incluye, que aunque se haya aprendido, no se ponga en práctica. Existe mucha ignorancia porque la gente no lee; por lo tanto, tampoco escribe.
Se ha comprobado que el cerebro almacena la información que entra por sus sentidos. Si por el sentido de la vista solo percibe imágenes o lecturas breves superfluas e incluso con faltas de ortografía (muy comunes en las redes sociales), eso será lo que almacenará y después replicará. Por eso, si una persona no lee fuentes de información confiables, lo que tendrá es no solo ignorancia, sino también carecerá de la habilidad para escribir adecuadamente. Por esta razón, se ve a muchos haciendo el famoso “copy & paste”, pues no tienen realmente nada para escribir.
De ahí la importancia de fomentar desde muy pequeños el amor por la lectura y la pasión por los libros. Eso se consigue no solo al adquirir libros llamativos, sino también, siendo ejemplo de lectura, apartando un tiempo especial para leer con los pequeños, comentando las lecturas realizadas y motivándolos a escribir sus propias ideas. Así, al ir creciendo nunca perderán el hábito de leer y luego podrán escribir documentos originales, que los llevarán al éxito en el ámbito académico, empresarial y profesional, dejando grandes aportes a la sociedad.